INTRODUCCIÓN
El
desarrollo de la humanidad y los procesos educativos son parte de un mismo
ciclo. Además puede mencionarse que
ambos poseen procesos propios los cuales, algunos de ellos se intersectan en el
sistema o red de pensamiento. Atendiendo
a esta visión dialéctica, se puede mencionar que la andragogía, que busca
continuar la formación del adulto, y el constructivismo, que busca generar
conocimiento nuevo haciendo protagonista al discente, se complementan aportando
conceptos teóricos y práctica respectivamente.
Ambos tienen principios de actuación y toman en cuenta las habilidades
de los estudiantes, además de dar la oportunidad de tomar sus conceptos y armar
un nuevo sistema educativo que arroje como resultado metodologías dinámicas,
modificables y adaptables a las situaciones o condiciones del sistema
curricular específico o local. Es
importante relacionar en este ensayo ambos conceptos sin perder de vista el fin
último de la ciencia. El conocimiento
científico aportará en este ensayo sus características, las cuales serán base
de interpretación y relación de la andragogía con el constructivismo.
PALABRAS
CLAVE:
Andragogía
– Constructivismo – Facilitador – Discente – Horizontalidad – Participación –
Adulto – Ciencia – Conductismo – Asimilación – Autodinamismo – Holístico –
Dialéctico.
ANDRAGOGÍA
Y CONSTRUCTIVISMO
Antes
de iniciar con la composición acerca del tema se hace necesario recordar
algunas definiciones que faciliten la comprensión de la relación entre ambas
teorías. La andragogía, a diferencia de
la pedagogía que se dedica al estudio del proceso de enseñanza – aprendizaje en
niños, promueve y propone dirigir un proceso de orientación aprendizaje en
adultos, poniendo en el tablero central de juego los principios de
horizontalidad y participación que dirigirán el proceso en mención. Ambos principios darían origen a todas las
propuestas de la función andragógica, las cuales tomarán direcciones distintas
según el ambiente y la experiencia vital sobre la cual se desenvuelven los
participantes. El constructivismo,
propuesto entre otros, por Jean Piaget, es una teoría de la educación
antagónica al conductismo. El
constructivismo tiene como principio que el participante o estudiante debe ser
el constructor de su propio proceso de aprendizaje.
Para
lograr establecer una relación entre andragogía y constructivismo deberá
enfocarse la información primeramente desde el facilitador
constructivista. Este debe, en primer
lugar, ser un mediador entre conocimiento y aprendizaje. Al mencionar el principio de horizontalidad,
este se convierte en el instrumento que permitirá esa mediación. ¿Cuál sería la función de esa mediación
horizontal? Partiendo de que el
conocimiento en la educación adulta debe iniciar con la sabiduría previa o
experiencia vital, el facilitador constructivista debe tener la competencia que le
permita unir ambas dimensiones:
conocimiento (previo y sistemático) y aprendizaje (significativo, no
mecánico). Para Ausubel, el
conocimiento significativo será aquel que parte de los conocimientos previos
del participante y además, debe llegar a edificar un modo de pensamiento que le
permita no solamente concluir, sino analizar, proponer y diseñar conocimientos
nuevos que lo lleven a resolver problemas, a prevenirlos o modificarlos hacia
formas transicionales que permitan su resolución. El conocimiento también viene preparado en
formas que el facilitador deberá procesar para motivar a la transformación y
reconstrucción del participante, así como para obtener nuevos.
Un
facilitador constructivista es a la vez un colaborador con el
participante. Este es un punto que
establece una relación que facilita la horizontalidad. Podría decirse en este sentido, que el constructivismo
da las herramientas conceptuales y metodológicas que eliminan el dominio de la
verticalidad, a la vez que reduce las posibilidades de que el autoritarismo y
hasta el despotismo de algunos docentes se siga reproduciendo en el sistema
educativo superior o andragógico.
Colaboración con el participante significa apoyarle para el alcance de
sus objetivos y competencias, exigir asertivamente y evaluar tomando en cuenta
las formas y tipos de evaluación. La
planificación andragógica deberá estar enfocada en la heterogeneidad de los participantes
al planear estrategias diversificadas que le permitan al estudiante mostrar,
demostrar y plasmar sus conclusiones y propuestas.
La
promoción de análisis significativos deberá estar de la mano con la generación
de pensamiento crítico. En este caso
deberán tomarse en cuenta los niveles de asimilación que se proponen para
alcanzar la metacognición. El
pensamiento crítico deberá ser holístico, dependiendo obviamente de los
contenidos declarativos planificados.
Debe tener una visión dialéctica de las realidades a las que se
enfrenta, en otras palabras, debe considerar que un fenómeno natural o social
al cual se esté enfrentando es parte de un sistema o red de sucesos que tienen
un dinamismo propio, y que son parte del conocimiento científico. El constructivismo andragógico debe tomar en
cuenta que las características de la ciencia son oportunidades para la
generación de conocimiento. Las
características que la ciencia posee para aprovecharlas con fines
constructivistas son: a) La objetividad: se necesita para interpretar la realidad con
juicio crítico; b) Uso de lenguaje preciso: los términos, cálculos, unidades de medida, y
simbología pueden evolucionar hacia nuevas formas de expresión que muestren
nuevos datos derivados de los anteriores;
c) Metódico: Se construirá nuevo conocimiento siempre y
cuando se tome como directriz la línea metodológica científica según lo exija
el tema, en cuanto a lo cualitativo, cuantitativo o mixto; d)
Abierto: Es una de las
características más importantes de la ciencia al generar vínculos sistematizados
con el constructivismo y la andragogía, pues el conocimiento científico
evoluciona al proponer nuevas formas de estudio y recomendaciones. Las realidades cambian pues son consecuencia
del autodinamismo propio de los sistemas naturales y sociales. Ese autodinamismo genera un desarrollo del
conocimiento que
proporciona las herramientas para mejorar, crear o
eliminar saberes; e) Predecible:
El conocimiento científico es predecible, puesto que utiliza diseños que
permiten generar hipótesis de comportamiento de los sistemas, conjuntos o
elementos de análisis. Tras dicho
análisis, se concluirá y se sabrán los rangos de conducta de determinados
fenómenos; f) Comprobable:
La andragogía posee bases filosóficas, psicológicas y metodológicas que
llevan a que los resultados de los procesos educativos constructivistas puedan
comprobarse en los discentes mediante metodologías de evaluación y
realimentación de los procesos de planificación. Específicamente, los diseños estadísticos,
experimentales y los muestreos más simples evidenciarán la comprobación de las
hipótesis y confirmarán con mayor detalle el por qué de las observaciones tanto
cualitativas como cuantitativas en el proceso de investigación.
El
constructivismo debe complementar a la andragogía en la práctica. Debe proveer las herramientas para proponer
cómo se construirá ese conocimiento.
Ahora bien, se hace necesario establecer los mecanismos que aseguren la
praxis andragógica específica en cada una de las disciplinas o asignaturas que forman
a los discentes. Queda en manos de los
facilitadores especialistas en cada rama aplicar estos conocimientos mediante
la previa investigación para así transformar
la adquisición, análisis y proposición de conceptos que permitan la
mejora del nivel de vida de la sociedad.
CONCLUSIONES:
· - La andragogía y el constructivismo son
complementarios. El constructivismo
culmina en la praxis al recoger los elementos conceptuales andragógicos para
crear nuevas formas de generación de pensamiento científico que lleven a la
consecución de objetivos y alcance de competencias.
· - El facilitador andragógico media entre el
conocimiento y el aprendizaje.
Interpreta, da forma y provee las herramientas de análisis del
conocimiento. El discente reorganiza la información,
analiza sus conceptos y extrae nuevos conocimientos.
· - El facilitador constructivista es un
colaborador del participante, pues es parte del mismo sistema. El principio de horizontalidad le permite ser
parte directa del proceso de orientación y es un líder colaborador que comparte
la misma visión que sus discentes.
· - El facilitador andragógico debe promover
el pensamiento crítico y el análisis significativo a partir de los
conocimientos previos del discente.
· - Las características del conocimiento
científico se enlazan perfectamente con los principios andragógicos y el
quehacer constructivista. La ciencia es
abierta, objetiva, utiliza un lenguaje preciso, es metódica, comprobable y
predecible.
BIBLIOGRAFÍA
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Recuperado de http://www2.udec.cl/ofem /recs/anteriores
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2. Bonilla
Landaverry, G. (2017). Docencia
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Serviprensa.
3. Castillo
Silva, F. (2014). Andragogía,
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México, Carteles
editores.
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